Comprar carros nuevos en Perú es una inversión importante, y su mantenimiento adecuado es clave para asegurar un desempeño óptimo a lo largo del tiempo. Entre los aspectos esenciales que garantizan una conducción segura y confortable se encuentra el cuidado de las llantas.

Una parte fundamental de este mantenimiento es realizar periódicamente el balanceo de neumáticos. Descuidar este servicio puede derivar en una serie de problemas como un mayor consumo de combustible o incomodidad al manejar. En este artículo, exploraremos las señales que indican la necesidad de este proceso y con qué frecuencia debe llevarse a cabo.

¿Qué es el balanceo de ruedas?

El balanceo de ruedas es un procedimiento mediante el cual se equilibran las llantas y los rines de un carro para evitar vibraciones y garantizar un desplazamiento suave. A pesar de que a simple vista todas las llantas parecen iguales, existen pequeñas diferencias de peso en cada lado. Estas imperfecciones pueden generar un desgaste desigual y afectar la estabilidad del vehículo.

Para corregir este inconveniente, los técnicos utilizan contrapesos en los rines, asegurando que la rotación de las llantas sea uniforme y que no haya vibraciones que puedan comprometer la seguridad del conductor y los pasajeros.

Un balanceo adecuado no solo mejora la comodidad en la conducción, sino también contribuye a prolongar la vida útil de los neumáticos y a reducir el consumo de combustible. Además, ayuda a evitar daños en la suspensión y otros componentes del coche que podrían verse afectados por las llantas desbalanceadas.

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Balanceo de ruedas y alineación de neumáticos: ¿Son lo mismo?

Es común que el balanceo se realice junto con la alineación, pero es importante destacar que son dos procesos distintos:

• Balanceo de ruedas: Distribuye el peso de las llantas de manera uniforme para evitar vibraciones.
• Alineación de neumáticos: Ajusta el ángulo de las llantas para garantizar que tengan el contacto adecuado con la carretera y evitar que el carro se desplace hacia un lado.

Ambos procedimientos son necesarios para el mantenimiento del automóvil y te recomendamos realizarlos según la frecuencia establecida por el fabricante.

Señales de que tu carro necesita balanceo de ruedas

Es fundamental estar atento a ciertos signos que pueden indicar que tu coche requiere un balanceo de llantas. A continuación, te presentamos las principales señales de alerta:

1. Vibraciones en el volante o el tablero

Si al conducir a velocidades superiores a 80 km/h notas que el volante vibra, esto puede ser un indicativo de que las ruedas están desequilibradas. Estas vibraciones pueden extenderse al tablero, los asientos e incluso al piso de tu auto.

2. Desgaste irregular de los neumáticos

Otro síntoma de neumáticos desbalanceados es la presencia de un desgaste irregular en la banda de rodadura de las llantas. Si observas que algunas zonas del neumático se desgastan más rápido que otras, es probable que el balanceo no sea el adecuado.

3. Mayor consumo de combustible

Un vehículo con llantas desbalanceadas necesita hacer un mayor esfuerzo para compensar su falta de equilibrio, lo que se traduce en un incremento en el consumo de combustible.

4. Presión desigual en los neumáticos

Si notas que las llantas pierden presión de manera desigual, es posible que haya un desajuste en el balanceo, generando una conducción inestable y afectando la seguridad de tu coche.

5. Ruidos inusuales al aumentar la velocidad

Un ruido anormal, especialmente cuando tu carro va a alta velocidad, puede ser una advertencia de que el balanceo no está correcto.

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¿Cada cuánto tiempo se debe hacer el balanceo de ruedas?

Aunque las señales mencionadas son clave para identificar un problema de balanceo de ruedas, lo ideal es no esperar a que aparezcan para tomar acción. Para prevenir desgastes prematuros y fallas mecánicas, te recomendamos realizar un balanceo en nuestros talleres de servicio KIA cada 10 000 kilómetros o, al menos, dos veces al año.

Sin embargo, existen ciertas situaciones en las que es preferible realizar un balanceo de manera inmediata:

• Al cambiar las llantas de tu vehículo.
• Al reparar un neumático pinchado.
• Si tu carro ha estado inactivo durante un largo tiempo.
• Al notar vibraciones en el volante o el tablero.
• Si has recorrido un camino con muchas irregularidades.
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Si utilizas tu auto con frecuencia en zonas con mucho tráfico o caminos accidentados, te aconsejamos realizar el balanceo con mayor regularidad para evitar desgastes excesivos.

Ahora que tienes toda la información, ya sabes cuándo balancear tus neumáticos. Si notas vibraciones en el volante, desgaste irregular en los neumáticos o una conducción inestable, es momento de acudir al taller.

Mantén tu vehículo en óptimas condiciones y reduce el riesgo de problemas mayores con un mantenimiento adecuado. ¡Haz la diferencia en tu seguridad y comodidad al conducir!

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